Reflexiones De Vida

No me veo sometida bajo un régimen o un sistema. No soy las que cumple las reglas No soy la que anda por la vida haciendo lo más correcto No soy la que confía en que un semáforo le diga que es seguro pasar, para atravesar la calle No soy la que se combina la correa con los zapatos y la ropa con el maquillaje No soy la que usa tacones hasta para ir a ver un juego de  fútbol No soy la típica mujer, que va a la peluquería todos los fines de semana. Soy la imperfecta Soy la que le hace feliz el queso Soy la que no se le agotan las palabras y habla demasiado Soy la que no tiene límites Soy la que ve el teléfono, pospone la alarma 5 minutos más y se levanta tarde Soy la que le gusta dormir abrazada a  alguien Soy la que se sube en el techo de su casa por la noche,  a ver las estrellas Soy la que si alguien necesita ayuda, aunque no merezca, se la doy. Soy la Bipolar Soy la inconforme Soy la impuntual Soy la que escribe todo lo que le viene a su mente,

Uno de los placeres gratis, es hablar con gente libre, mente amplia, sin limitaciones. Estoy enamorada de la gente así. Hablaba con alguien que hoy se hizo especial para mí, y me decía… ¡no te limites a nada! no te dejes seducir por el confort, no sabes cuantas personas están viviendo en el “confort”, pero viven frustrados, pensando en” cómo hubiese sido si lo fueran intentado”?! Entonces fue en ese momento, donde mi decisión de cambiarme de Ciudad, fue impulsada por esas palabras.  Hay cambios que son necesarios, y mucho más cuando tienes objetivos trazados. Sus palabras me llegaron y movieron algo dentro de mí, ese espíritu adormecido, que solo ha perdido tiempo. "Siempre supe que tu lugar no era esté, tienes una mente diferente, hazte responsable de este desafío, tienes con que, tienes mucho"... esas palabras, hace mucho tiempo no pasaban por acá, estaban ausentes. Hay gente que cree mucho más en mí, mas de lo que yo pueda creer en mi misma. Que la gente

Particularmente pienso, que ningún ser humano debe depender emocionalmente de alguien.  Es cierto que hay personas que llegan a nuestras vidas y nos parecen tan únicas, tan perfectas, tan brillantes, tan genios, tan inteligentes, tan raritas… y sin dudas que una piensa que ¡Bingo, tengo a la persona ideal!. Puede que lo sea, puede que merezca mucho amor de ti y cosas bonitas, pero cuidado... no dejes que tu mundo gire solo a su entorno. En una relación siempre habrá alguien que da más, y obvio, otro que da menos, y suele suceder, que cuando esa persona llega, te toca dar más a ti, y es porque sin dudas has esperado tanto por esa persona que no quieres seguir perdiendo más tiempo. Se comienza a dar sin medidas, sin límites, sin excusas, y raramente se piensa que lo das todo, se siente como si no has dado nada y quieres dar más, porque la persona que tanto esperaste ha llegado y ella lo merece todo. Merece todo, menos las dudas que tuviste con todas las personas en relaciones falli

¿No les pasa que a veces sienten que se comerán el mundo con la persona que deciden darle lugar en sus vidas?  Se siente como si nada más falta…  ¿No les pasa que no les importa el mundo y sus etiquetas?...que nada es más grande que tú, excepto ese Amor que sientes por ese alguien. Si esto te pasa, es porque sin dudas, encontraste el amor! Comienzas a visualizarte prósperamente; casa, carro, un apartamento en la playa, un perro, un gato y hasta un burro que tendrá por nombre “sorprendido”.  Luego te das cuenta de que el Amor no es suficiente si solo se ama de una sola parte. Siempre comparo el amor de dos personas, con un viaducto. Un viaducto, se sujeta de ambos extremos. Si se cae de uno de sus extremos, va a ser intransitable, no comunica, hay  un vacío de algo que solo existió. Todo se desgasta, eso dice la gente. Es cierto que las cosas se desgastan, pero en el Amor no debería, si realmente es amor. No lo leí en un libro, no solo existe en las películas. Es decir,

Extraño el sabor dulce de tus labios, y no me refiero precisamente a tu boca. Extraño tu olor de piel, y no me refiero precisamente a tu perfume. Extraño el sonido de tu voz, y no me refiero precisamente al sonido que emites cuando hablas. Extraño sentirme como niña sedienta, que tú me alimentes, y no precisamente con alimentos sólidos. Extraño cuando me tomaban tus manos, y no precisamente para caminar. Extraño tus besos de Bienvenida, y no precisamente en la mejilla. Extraño acostarme a tu lado, y no precisamente para hablar. Mis manos extrañan tocarte, y no precisamente tu rostro. Cada partícula de mi piel, extraña cada partícula de tuya… Sobretodo, aquellas más sensibles!